Suaves, Delgados y Descarnados

Creí que todo había pasado, creí olvidarte y creí no verte más en mis noches, pero por desgracia para mí, me encanta tu foto de perfil; blanco y negro te describen con sorprendente sensatez, ahora solo tengo que recordar tus colores para intentar apartarme del pigmento de tus labios.

A veces me pregunto ¿qué tienes de sorprendente? y simplemente no logro responderlo porque tal vez no es nada pero de ti me mata todo,

estoy que destrozo una rosa espinada para tener las manos laceradas y no tener con que escribir, es probable que ni recuerdos tenga en 15 años.

Vos en la cuna te acentúas, tu rostro y cara angelical me matan, creo sentir como pierdo la cabeza a pesar de que me matas, contigo no quiero llorar ni gritar pero tampoco volar, solo quiero contigo.

Me llegan las 12 y si me cogen despierto me llevan al tiesto…

ODA A LA DESDICHA DE LA PUTA

La más puta de las Geishas navega sin querer

Navega sin nada que perder y tal ves con mucho que ganar

Se echa a nadar en su bikini púrpura

Se echa a nadar en la oscura cueva del mar
Se sumerge sin saber respirar

Pero al fin y al cabo, con un pulmón de puta más

Nada exclusiva y nada que nada más

Nada alrededor, al centro y a todo lado
Se hace Sirena la que nunca nada fue

Sirena Geisha y puta será

Pero jamás Sireno existió ni para una puta ni para una Geisha existió

La que nunca quiso estar sola, sola quedo la pobre puta sola quedo
Que lamento al que a los marines sometió la pobre puta

Ni cazarla ni matarla pudieron

Soportar fue el lamento de los marines sin karma que pagar
No me explico por que la pobre nunca se mato

Si vivía, en sirena propia el dolor de la cueva mar

Sin amar no pudo estar la pobre puta

Pobre puta que ni amarrando sola dejo de estar
De tanto deambular la sirena Geisha al fin encontró

Y las palabras que encontró no las pudo descifrar

Aunque por algún motivo sabia que decían

Pero no podía leer

La falta de lectura en su trabajo la iletró de sirena
De sirena quiso salir

Las letras que encontró, eran el conjuro para el fin

El fin de su desdicha no en muerte si no en dicha
Lastima por la sirena, que picha quiso estar de la dicha

Oh vida infame de la pobre

Oh vida infame de la picha, de la sirena y la puta

Que nunca quisieron encontrarse en una sola

Se muere sin final y nada que perder
Pobre Geisha puta por nada poder dejar

Y pobre clamo por la por la puta que jamás fue más.

¡¡¡Ni de cama ni de luna!!!

Esta noche si me voy temprano, las 2 de la madrugada ya me odian, en verdad creo que están hastiadas de mi presencia matiné y están que me mandan a la mierda por mis sueños recurrentes -no- ni húmedos, ni sueños de dormir, más bien anhelos o mejor dicho el recuerdo de sus ojos, y no los suyos, si no los d ella.

Me siento mareado de pensar en ti, se que te quiero y comprendo que tienes sentimientos así no sean por mí. Estoy cerca de oler mal, el dolor pudre mi alma y aun peor que eso es la inexistente salida a la desdicha de mi corazón; no soy masoquista, solo soy un enamorado, a mí también me da coraje estar así por ti, creo que muchos quisieran matarte por mí, los mismos muchos que no lo harían por mi y que les temblaría la mano de pensar en ti.

Nunca te he dicho que tus ojos son mi mayor fuente de inspiración pero pregúntaselo a los versos que salen de vos y pregúntaselo a las madrugadas que noche tras noche no hacen más que traerme remedios para el insomnio pues realmente están cansadas de ti.

No quería que te fueras como heroína y regresaras como leyenda pues el setenta y dos no aguarda más, no te quiere más y te repudia cada noche más, encuentro extraño que no le hayas dicho adiós nunca más.

La intensidad del rojo con que debería ir este texto me la corrompe

el fondo tenue de esta triste ocasión, por eso en ésta,

la emoción y sinceridad del verde se acentuó.

¿Cuántas noches en velo te veo en el frio de mi amor?

Cuantas noches en velo te retengo y no te quiero dejar ir, tengo miedo ¿será posible que en verdad nunca pueda tenerte? En verdad nunca tenerte más, incluso perderte de ensueños, sueños que en ocasiones son buenos y malos pero que al final siempre estás en ellos.

Tengo mucho más miedo de lo que a veces creo, en verdad te necesito pero eres tan perfecta en mis sueños; sé que la perfección no existe, por eso tengo miedo, sé que eres ideal y también sé lo que eres, si el amor es ciego soy una cruenta afirmación de ello. No es justo que la realidad se ensañe conmigo y me haga perder la noción, han pasado muchos meses desde que te vi por primera vez y cuando creí olvidarte apareces para darle la estocada final a este sucio corazón vago y sin intereses, envidioso y a la vez ocioso.

No más carbón para la ceniza que se lleva el viento y se extingue en el tiempo, no más ninfa, no más sensualidad -y por favor- deja de ser la última ambrosia del mundo -porque eres tú- la que ahoga mi alma en pena.

Quisiera enseñarte a amar!!!

Quisiera que supieras como se siente ser feliz,

como la vida te sonríe bajo el lecho de la adversidad.

Quisiera enseñarte mis sentimientos cuando tiemblan mis piernas,

y en especial cuando soy incapaz de pronunciar una sílaba frente a ti.

Todas esas veces que quise darte algo de lo que siento,

no me lo permitiste, no lo quisiste y si supieras de lo que te perdiste...

Quisiera que supieras la cantidad de fuerzas que he reunido por y para hablarte,

te mostraría cuan desecho me he sentido y te juro... lo sentirías en el alma,

nunca más querrías verme por pena y no sabrías como remedia el amor que siento por ti,

pero lo quisieras hacer a toda costa porque tu alma no me quiere ver sufrir.

No quiero escribir más,

no soporto darle vueltas a mis sentimientos sin encontrar su perfecta definición,

no eres mi Dulcinea y no soy tu Romeo,

pero si eres la ninfa de la sensualidad y el amor,

la que acelera mi corazón.

Perdóname pero no puedo más, tan solo quiero renunciar a tu amor,

no me juzgues por no aguantar más,

aunque en el fondo sé que seguiré como un perro a la sombra de tu corazón...